Marinilla y su restaurante Elemental
Desde hace más de mes y medio estábamos esperando que llegara el 31 de agosto, nos habíamos puesto parte del equipo Milamores una cita, una de esas que se esperan con ansias por parte de todas las invitadas, en la que la anfitriona era nada más y nada menos que MILAMORES, esta cita era el motivo perfecto para darle las gracias a Stepha quien creyó en nosotras desde el principio, la misma que tuvo que trabajar en una tabla de madera como escritorio al principio porque no nos alcanzaba para más, la misma que vela constantemente por el bienestar de todo el equipo, a Katherine por su cumpleaños y porque ella aunque es un sunami de energía positiva, es un ángel que es capaz de transforma la vida no solo de nuestros clientes sino también de sus compañeros de trabajo, a Sandrita la mama de la oficina que también estaba de cumpleaños y la misma que nos cuida permanente a nosotras y a las mezclas que se preparan de manera sinérgica en nuestra planta para darle vida a la transformación que se vive de manera natural gracias a nuestras infusiones, comprobado en miles de testimonios que recibimos gracias a ustedes todos los días.
Mejor dicho mis amores, ese era un día de celebración, por la vida, por nosotras, por milamores, por ustedes y por esta razón y muchas más decidimos irnos para Marinilla a comer en el restaurante Elemental y a vivir un poco lo que es MilRaices recorriendo sus calles, viendo su gente, descubriendo su energía. Y para el que no ha ido a Marinilla, les recomendamos ir a un restaurante al mejor estilo Milamores y donde soñamos algún día muy cercano tener una experiencia que no necesita otro nombre que Milamores, porque en este lugar que queda en la plena plaza principal del parque de Marinilla en un segundo piso se encuentra este lugar lleno de magia, rincones por descubrir, platos que hacen despertar los más exquisitos y finas sensaciones y donde cada detalle es pensado con el único fin de conquistar con Mil amores a sus comensales.
Y recuerden mis amores, que la vida es como una balanza y para que funcione es necesario que aprendamos a sacarle tiempo a esas cosas que en dinero no puede comprar, eso son los amigos, nuestra gente y por eso la vida hay que disfrutarla llena de bienestar con Mil Amores.
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