Desde que conocí la comida árabe me enamoré perdidamente del tradicional hummus de garbanzos, esa crema que le untaba al pan con que lo servían, era un suave manjar para mi boca.

Años después, cuando Susy mi socia, mi hermana, mi amiga, se volvió vegetariana, empecé a explorar junto a ella las recetas nuevas que iba aprendiendo en su afán de volver ricos sus menú y por supuesto no podía faltar el hummus y esta receta es nada mas y nada menos que una herencia de  su familia paterna, ya que estos son descendientes árabes y fui por ellos que aprendí a preparar una de las delicias de la gastronomía mundial.

La semana pasada, cuando buscaba en mi despensa garbanzos para hacer hummus, lo único que encontré fueron paquetes de arvejas en cantidades, confundida de como las iba a gastar esos 6 paquetes que tenía ahí esperando a “cobrar vida”, me pregunté que porque no podía hacer hummus con ellas… estaban secas, se parecían a los garbanzos y además no perdía nada. Así que ¡manos a la obra!

INGREDIENTES:

• 500 gr de arvejas secas
• 2 cucharadas de tahini
• 2 limones
• 1 cucharada de aceite de oliva
• Sal y pimienta al gusto
• Agua

PREPARACION:
1. Puse a remojar 500 gr de arvejas secas de un día para otro.
2. Luego los cociné con 2 dientes de ajo, sal, pimienta, un chorro de aceite de oliva y suficiente agua que los tapara hasta que estuvieran blandos.
3. Una vez estaban blandos, los colé y los puse en la licuadora con 2 cucharada de tahini, el zumo de los 2 limones, 1 cucharada de aceite de oliva y más sal al licuar.
4. Por último los serví, le rocié para la decoración pimentón molido y un tris de aceite de oliva, acompañado de una tejaditas de SUSI PANADERIA.

Mis amores, espero les haya gustado esta receta y que la preparen, es una muy buena opción de snack con zanahoria y además es sumamente saludable.

Si te gustó esta receta no dudes en compartirla, Isa.